Vuelta a la rutina.

Esta semana ha sido la primera después de más de 10 días de descanso. Y ¿cómo podría resumirla? como una bazofia.

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El karma me ha jodido pero bien, o me ha mirado un tuerto, que también podría ser. La semana parece que empezó con normalidad, estudiando, porque el martes tenía un hermoso examen de Fol sobre le Derecho Laboral. Uno de esos exámenes que postpusimos hasta después de las Navidades (gran error), así que nada, pasándole estudiando como se pudo, fuimos a clase, vernos las caras, ver las caras a las profesoras y demás.

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El martes era ese día fatídico, el día del examen, que me lo quería quitar de encima como fuese. Pero no, no pude ir a clase, un virus de esos del estómago aterrizó en mi instetino inpidiéndome el ir a clase. Bueno, vale, no dramaticemos, es un examen de FOL, "Kuki" ya me lo repetirá. Total que quedándome el martes en casa, sin hacer nada porque mi cuerpo no estaba para mucha jota, fue pasando la semana.

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El miércoles pues idem, no podía with my life, así que nada. Dije, voy a quedarme en casa, para recuperar, y aunque sea aprovecho un poquito la tarde en casa. Y eso hice.

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Con el jueves, volvía el jueves de la muerte del curso: escuela de idiomas + grupos en el cole + clase. No pasa nada, todo es superable. Pero aquí es o cuando me miró un tuerto o el karma quiso hacerme desgraciada. Aun no estaba recuperada de mi estómago al 100%, y para colmo mi muela del juicio (sí, debo estar volviéndome formal o algo así) empezó a tocarme los... lo que todo sabemos. Mi cara por el lado derecho el doble de lo normal, un dolor insoportable, sin poder abrir la boca, me dolía hasta al tragar saliva... bueno, pues después de clase dije: voy a urgencias a que me den un chute de algo para poder dormir. Fui, y con un pinchacito en el culete me fui a la cama tan pichi. Dispuesta a afrontar el viernes, el final de semana.

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Pero no, el tuerto siguió haciendo de las suyas. Eran las 5 de la mañana cuando un fuerte dolor de estómago me despertó, y desde ese momento, el virus atacó más fuerte que nunca. Así que a las 10 de la mañana, cuando era un auténtico despojo humano, me volví a urgencias. Muy bien, 2 veces en apenas 12 horas. Y llegué allí y que si me vuelven a pinchar, que si te saco sangre, que si te pongo una vía, resumiendo: 3 horas en urgencias, pasándome sueros, medicación... etc. Lo que quiere decir que ayer tampoco pude ir a clase...

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Vamos, que ha sido una semana fantástica [nótese mi tono sarcástico].

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Y lo mejor de todo, es que solo tenemos 3 semanas antes de empezar los exámenes [otra vez]. Los exámenes de la 2º y última evaluación. ¡OMG! y ya he perdido una, así que no sé que hago aquí escribiendo y dando la chapa, cuando seguramente ni siquiera lo lea nadie...

Así que nada, voy a ver si hago algo útil con mi vida. De todo lo que tengo que hacer, no sé por donde empezar.

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Nos vemos por la vida :).