domingo, 19 de septiembre de 2010

Cruz e Icono de los Jóvenes


Desde que finalizó el curso, por la delegación de juventud de la diócesis de Santander ya se andaba preparando esta intensa semana pasada.




Ya he dejado constancia en anteriores entradas del acontecimiento que tendrá lugar en Madrid en agosto del 2011, la Jornada Mundial de los Jóvenes (JMJ). Con motivo de ello, existe una Cruz que el Papa Juan Pablo II (recordado como el Papa de los jóvenes), en 1984 regaló a los jóvenes del mundo como "símbolo de unidad y de paz", a esta cruz se le unió en el 2003 un icono de la Virgen María, también regalo de Juan Pablo.


Estos símbolos, recorren el mundo entre JMJ y JMJ, ha estado en lugares de todo tipo y han sido adorados por miles y miles de personas: ricos, pobres, enfermos, presos, discapacitados, gente feliz, gente triste...

Y esta semana, nos tocó recibirla en la Diócesis de Santander. El pasado domingo, los amigos vecinos de la Diócesis de ASturias nos pasaron el testigo para que pudiéramos disfrutar de ella. Así que durante todos estos días ha habido un montón de actos, actividades, vigilias y oraciones en torno a ellos repartidos por diferentes puntos de la región.


El domingo comenzó con un multitudinario via crucis por toda la ciudad de Santander, que finalizó con una vigilia en la Catedral. Me dio mucha rabia no poder estar presente, (ya que estaba en Madrid), pero por suerte he podido disfrutarlo durante el resto de la semana, y casi sin esperarlo.


El miércoles, Alfonso y yo nos calentamos la cabeza ¡y nos fuimos hastas Potes! (para quien no lo sepa, ir a Potes desde Santander lleva una horita larga teniendo que pasar un bonito desfiladero...) y disfrutamos de una viglia de oración con la gente del pueblo. Ufff, ¡no sabéis que emoción sentí al tener la cruz ante mi! no es enooormemente grande, ni majestuosa, es sencilla, con una plaquita con un mensaje, pero sólo de pensar en su trayectoria y en lo que significa se me llenaban los ojos de lágrimas.

Al día siguiente, Jueves, la cruz salía desde la Catedral de Santander hasta el Embarcadero y luego tenía una peregrinación en barco hasta Pedreña. Ahí nos fuimos Alfonso y yo, sin esperanzas de subirnos a ese barco, porque había que tener un pase especial, pero al final la suerte estuvo de nuestro lado y conseguimos uno de última hora, así que a Pedreña nos fuimos, donde por cierto, la oración fue preciosa!!!



Y por último, ayer sábado, nos fuimos hasta Marrón (el pueblo siguiente a Ampuero), ya que había un via crucis hasta el Santuario de la Bien Aparecida (patrona de Cantabria), donde se celebraría la misa de envío de la Cruz y el Icono, en la cual le pasaríamos el testigo a la Diócesis de Vitoria. Fue una mañana muy bonita también, donde un nutrido grupo de Jóvenes acompañamos a la Cruz durante el recorrido, cargando con ella, todo sea dicho (no recomendable subir con una cruz a cuestas... me tocó dos estaciones y hoy mis brazos se quejan jeje). La celebración en el Santuario fue bonita, animada por nuestros cánticos, pero también se mezclaba con la tristeza de que tuviéramos que entregar ese símbolo del que nos despedimos hasta Agosto del año que viene.

¡Esto no para! ya estamos metidos de lleno en la organización, hay un gran reto por delante... ¡e ilusión no nos falta! Si alguien quiere más información http://www.jmjsantander.com/



¡Nos vemos por la vida!

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